Llegamos a un punto de descanso, de parar, de respirar, y de poder conectar y disfrutar de otros momentos, de otros espacios y de otros tiempos…se acerca Navidad, se termina este año difícil, complejo y en el que continuamos escuchando la palabra COVID, pandemia, virus, vacunas, etc.…un año en el que hemos tenido que continuar sacando todas las herramientas de adaptación, resiliencia, resolución para poder seguir en marcha. Por esto es tan necesario descansar, y cambiar las responsabilidades y los horarios por otras rutinas marcadas por el placer, el disfrute y la calma. En AMADEM, hemos trabajado duro este año, nuestras personas merecen un gran reconocimiento, ya que ante la dificultad de los problemas emocionales, afectivos, mentales y de la conducta, se esfuerzan por estar dentro de este sistema siguiendo todas las recomendaciones, pautas y medidas para que todo marche bien. Por otro lado, tenemos a nuestra Junta Directiva, personas comprometidas con creencias y valores, que trabajan por una Salud Mental más fuerte y mejor atendida. La administración pública, en realidad, algunas de ellas, que desde su lugar nos acompaña y apoya para mejorar recursos, atención y mejorar la calidad de vida de sus cuidadan@s. Y por último las empresas privadas, estos poderosos grupos que más allá de la cantidad, con sus aportes nos han posibilitado mucho. Gracias a todas las personas solidarias, empáticas, sensibles que creen que las cosas pueden hacerse mejor y que cambiar el rumbo de lo que está establecido, es posible. Gracias a esto estamos logrando muchos objetivos. Desde el día 23 hasta el 7 de enero, disfrutaremos de otra manera nuestro día a día, pero siempre priorizando nuestra salud mental: haremos deporte, dormiremos bien, compartiremos tiempo con afectos, iremos sin tanta prisa, nos reiremos mucho, y si alguna emoción negativa nos invade, la sentiremos, la aceptaremos y no pasará nada. Todo es necesario y parte de este proceso, lo importante está en la buena gestión de lo que sentimos y si algo se nos escapa, hay que pedir ayuda.
¡Recuerden!: cuidar y lo más importante cuidarse. Querer y quererse.
Luisina Daives. Psicóloga de Amadem